Nacido norteamericano pero de ascendencia cubana, el infame Adolfo Constanzo se convirtió en el médico brujo tanto de la alta sociedad como de los bajos fondos de Miami y la frontera de México a través de sus cultos de santería. Un mayombero diferente, carismático a la par que asesino, cuyos rituales eran tan sangrientos y obscenos que cuando en 1989 la policía llegó a su rancho donde él y sus acólitos, entre los que se contaba Sara Andrete, su supuesta suma sacerdotisa, realizaban sus ritos, el hedor que emanaba el caldero donde hervían miembros humanos era difícil de soportar. 

Sus crímenes conmocionaron a México, especialmente a la gente de la frontera, y ahora el actor Diego Boneta revivirá la magia negra de Constanzo en Brujo, la serie para HBO Max de la cual es también productor ejecutivo y que cuenta la historia del santero desde la perspectiva de dos de sus colaboradores, según informó Variety.

Además de Boneta, flamante protagonista de la serie Luis Miguel, de Netflix, la miniserie repite con Daniel Krauze como guionista y con la dirección de Humberto Hinojosa (I hate love y Oveja negra), y tendrá diálogos en inglés y español. 

Aunque todavía está en desarrollo, esta nueva producción de HBO sin duda promete mantener a los espectadores pegados a sus butacas y tentados a santiguarse. 

Este no es el único proyecto en el que Boneta se encuentra inmerso. Antes del inicio de la pandemia, el actor de 29 años estaba rodando la segunda temporada de la exitosa Luis Miguel, la serie, que se estrenará el próximo año. 

Además, es el protagonista de Gato Negro, la adaptación a la gran pantalla del cómic independiente de superhéroes latinos de Richard Domínguez, que está dirigida por Robert Rodríguez. 

El mítico cómic, del que sólo se publicaron cuatro números entre 1993 y 1996, se centra en las aventuras de dos héroes hispanos de una misma familia que luchan contra el crimen en el sur de Texas: un hombre joven, heredero de un superhéroe local que debe vengar la muerte de su amigo, y su propio abuelo, un histórico luchador mexicano que veló por la comunidad. 

Tanto Gato Negro como la anteriormente mencionada Brujo son una excelente noticia para los latinos a un lado y otro de la pantalla, ya que sus historias, aun tenebrosas, sangrientas y delictivas, como en el caso del biopic de Constanzo, otorgan un altavoz en una industria en la que cada vez tomamos un mayor espacio y visibilidad.