Desde hace unos años muchas marcas vienen replanteando la forma de generar sus líneas de juguetes. La intención es que los juguetes que salen al mercado sean más inclusivos y representativos para los niños y sus familias. Las muñecas American Girl son un símbolo para los millennials y este año celebran su 35º aniversario. En este marco han lanzado una colección para enseñar sobre la historia de los Estados Unidos reeditando algunas de sus muñecas. 

Son seis las muñecas que pertenecen a la colección dentro de las que se encuentra la muñeca latina, Josefina Montoya. Junto a ella la colección presentó a Felicity Merriman, Kirsten Larson, Samantha Parkington, Addy Walker y Molly McIntire. En cada caja de American Girl se incluye el primer libro de bolsillo del personaje con una portada de época.

Josefina Montoya representa al Nuevo México de 1824, época previa a la guerra mexicano-estadounidense. La muñeca fue desarrollada con la orientación de un consejo asesores conformado por historiadores, educadores, conservadores y otros profesionales con conocimientos académicos sobre el sudoeste americano,según comunicó la marca American Doll. Vive en un rancho cerca de Santa Fe con su padre y sus tres hermanas mayores, lleva una trenza con una flor, mocasines de cuero de imitación, una camisa blanca con mangas cortas abullonadas ribeteadas con encaje y un collar de cruces que, según la marca, proceden de Ciudad de México.

Josefina aspira a ser una curandera, como su madrina Magdalena. Es un personaje idealista, cariñoso y esperanzado y cree fielmente que "la bondad es realmente la mejor medicina".

Como parte de la investigación Valerie Tripp, autora de la serie pasó algunos meses viviendo en Nuevo México y entrevistando a mujeres mayores para entender su vida cotidiana y su cultura: "Estas mujeres me hablaron de la lavandería, la cocina, la costura y otras tareas domésticas. Pero, sobre todo, me contaron cómo las personas de familias como la de Josefina se cuidaban unas a otras", afirmó. 

La icónica marca de muñecas ha pensado que muchas de las niñas que jugaron con esta clásica muñeca son ahora madres, por ello la intención es poder crear experiencias especiales y multigeneracionales para ellas y sus niñas.