“Escuché que el (programa) de baja audiencia habla mal de mí (ya no lo veo). ¿Cómo es que entonces que la loca con bajo coeficiente de Mika, junto con el loco Joe, vinieron al Mar-a-Lago 3 noches seguidas cerca de nochevieja e insistieron en unírseme? Ella sangraba horrible por un estiramiento facial. ¡Dije que no!”

Eso escribió el presidente durante la mañana de hoy como retaliación a los presentadores del programa matinal, quienes en un principio hubiesen apoyado al magnate en su campaña electoral, cambiando luego de parecer.

La cadena responsable del programa, la MSNBC, respondió que “es un día triste para América cuando el presidente gasta su tiempo acosando, mintiendo y vomitando ataques personales en lugar de hacer su trabajo”.

De manera casi inmediata, las reacciones contra el comentario del presidente se hicieron sentir en las redes, empezando por la propia Brzezinski, quien publicó una foto en twitter con una imagen que se mofaba de las “manos pequeñas” del presidente.

Por su parte, Mark Kornblau, el presidente de relaciones públicas de NBC News y MSNBC, escribió que “Nunca habría pensado que llegaría el día cuando consideraría que responderle al Presidente de Estados Unidos está por debajo de mi dignidad”, según reportó The Independent.

Varios políticos también hicieron público su rechazo a la conducta del presidente. El senador Lindsey Graham aseguró que “este tipo de mensaje representa lo peor de la política en América”, así como Ben Sasse “le suplicó que parara de una vez”, según el diario El País.

Por su parte, Nancy Pelosi, cabeza de la minoría demócrata en la Cámara de Representantes, exigió al presidente que se disculpara, asegurando que sus comentarios son “sexistas, un asalto a la libertad de prensa y un insulto para las mujeres”.

A pesar de que muchos manifestaron que el presidente se habría “pasado de la raya” con sus comentarios, la Casa Blanca ha apoyado a Trump, declarando que “No creemos que el Presidente sea el tipo de persona que se ve atacado y no responde”, dijo la vocera Sarah Huckabee Sanders.

Durante la rueda de prensa en la Casa Blanca, Sanders aseguró que el presidente “es un luchador” que “no se quedará de brazos cruzados” ante los ataques, preguntando a los medios inmediatamente qué hubieran hecho si los conductores de Morning Joe hubieran comentado negativamente a Barack Obama.

De una u otra manera, Donald Trump sigue demostrando que como el hábito no hace al monje, tampoco el título de presidente hará del magnate un hombre de buenas maneras.