El hecho de que Wisconsin fuera un estado campo de batalla siempre iba a ser importante para decidir quién ganaría las elecciones presidenciales de 2020, pero después de que un tiroteo policial contra un hombre negro en Kenosha lanzara otro grito para que se abordara la injusticia racial y la seguridad pública, se hizo inevitable que tanto el presidente Donald Trump como el nominado demócrata Joe Biden visitaran el lugar. 

El 23 de agosto, Jacob Blake estaba "interrumpiendo una pelea" según el abogado de su familia cuando los agentes de policía llegaron al lugar. 

Después de resistirse al arresto, se dirigió a su coche para abrir la puerta y fue entonces cuando le dispararon por la espalda siete veces. Blake está ahora paralizado de cintura para abajo y pasó varios días esposado a una cama de hospital. 

Esto llevó a la ciudad de Kenosha a experimentar manifestaciones masivas que resultaron en incendios y daños a la propiedad.

El presidente Trump viajó a la ciudad el martes, incluso después de que el gobernador de Wisconsin le escribiera una carta diciendo que su presencia sólo obstaculizaría la curación de la comunidad y retrasaría sus esfuerzos para superar las divisiones. 

En su visita, se reunió con los dueños de los negocios que fueron destruidos por la violencia y con los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley. 

Muchas de las personas que participan en manifestaciones similares en todo el país y los que simpatizan con ellas piden que se desactive a los departamentos de policía o que se redistribuyan parte de sus fondos. 

Pero durante una mesa redonda sobre la seguridad de la comunidad, Trump anunció que el gobierno federal asignaría 42 millones de dólares a las fuerzas del orden de Wisconsin. La policía de Kenosha recibirá un millón de dólares. 

Mientras estaba en Kenosha, no se reunió con la familia de Blake y aún no ha hablado con ellos. 

El presidente ha afirmado que se ha puesto en contacto con ellos, pero rechazó una reunión porque la familia quería que sus abogados participaran. 

Al tío de Blake, Justin Blake, le preguntaron cómo se sentía por la visita de Trump mientras organizaba un evento comunitario en la calle en la que dispararon a su sobrino. 

"No vamos a dejar que nadie manche el nombre de mi sobrino", dijo. "No tenemos palabras para el hombre naranja de la Casa Blanca".

Cuando el ex vicepresidente Biden aterrizó en Kenosha, fue la primera vez que visitó el Estado Tejón desde que lanzó su tercera candidatura presidencial. 

 Se suponía que iba a aceptar la nominación del partido demócrata para presidente en Milwaukee el 20 de agosto, pero debido a la pandemia en curso, lo hizo desde su estado natal de Delaware. 

El alcalde demócrata de Kenosha, John Antaramian, dijo a CNN el lunes que estaba decepcionado de que el presidente fuera a su ciudad, pero también esperaba que Biden hubiera esperado para visitarlo. 

"También preferiría que el [ex] vicepresidente esperara hasta la próxima semana antes de venir. Lamentablemente, la política está cada vez más involucrada, debido a la visita del presidente, en lo que respecta a lo que está sucediendo", dijo el alcalde. 

Tanto Antaramian como el gobernador de Wisconsin han hecho hincapié en que los viajes de ambos políticos supondrían una pérdida de recursos de seguridad. 

La senadora demócrata del estado, Tammy Baldwin, comentó sobre la visita del presidente Trump a Kenosha. 

"Cuando el presidente Trump vino [a Kenosha], realmente avivó la división", dijo. 

Una encuesta de Fox News de Wisconsin que se realizó entre el 29 de agosto y el 1 de septiembre, sitúa a Biden a la cabeza de Trump por ocho puntos.  

Biden hizo el viaje dos días después de Trump con su esposa la Dra. Jill Biden. 

Se reunieron por primera vez con la familia de Blake, pero esa conversación estaba abierta a la prensa. 

El ex vicepresidente luego organizó una reunión con los líderes de la comunidad en la iglesia de Kenosha y allí reveló parte de lo que Jacob le dijo. 

#BREAKING: Joe Biden talks about conversation with Jacob Blake: "He talked about how nothing was going to defeat him, how whether he walked again or not he was not going to give up." pic.twitter.com/SdxRmGzE0r

"Habló de cómo nada iba a derrotarlo, de que si volvía a caminar o no, no se iba a rendir", dijo Biden. 

A continuación escuchó a personas de diferentes profesiones y orígenes expresar su preocupación por el sistema de justicia penal y la violencia resultante de las protestas en curso. 

El nominado demócrata ofreció algunas de sus soluciones a las cuestiones destacadas por los oradores que, a su juicio, están respaldando a las comunidades negras de todo el país. 

Aprobar un salario mínimo de 15 dólares, enviar a los que consumen drogas ilegales a rehabilitación en vez de a la cárcel y destinar más dinero a la vivienda disponible fueron algunas de las propuestas que expuso.

Al dirigirse a los participantes en las manifestaciones, respetó su derecho a la protesta y condenó a quienes cometieron actos violentos al hacerlo. 

"Independientemente de lo enojado que estés, si saqueas o quemas, debes ser responsable", dijo Biden.