WATCH LIVE

LIVE STREAMING
Photo: National Geographic. 
Photo: National Geographic. 

Un reptil volador de cinco metro planeó sobre Colombia

Fue hace 135 millones de años -apenas un rato- y el descubrimiento de estos fósiles de pterosaurios ha sido todo un hallazgo en el país.

MÁS EN ESTA SECCIÓN

Cultura hispana en el cine

Carnaval 2025

La luna fue volcánica

Uso de los velos en cara

Principe Harry en NYC

Mexico apoya a Coca-cola

COMPARTA ESTE CONTENIDO:

Ligeros casi como una pluma -pesaban 250 kg-, sobre todo si tenemos en cuenta su gran envergadura, los pterosaurios fueron los primeros reptiles vertebrados voladores y planeaban sobre los cielos colombianos cuando el país estaba sumergido en el mar y Zapatoca, un municipio de Santander, era lo más parecido al Caribe. Un espacio de transición entre el mar y la playa donde se cobijaban y alimentaban tortugas, cocodrilos y grandes depredadores. 

De eso hace ya 135 millones de años, y sin embargo ha sido ahora cuando los paleontólogos han encontrado por primera vez fósiles de este grupo de reptiles en tierras colombianas.

El hallazgo ha sido obra del paleontólogo Edwin Cadena, investigador de la Universidad de Rosario, en Bogotá, que explicó a EFE que estas criaturas medían unos cinco metros al extender sus alas.

“Los pterosaurios fueron los primeros vertebrados en volar. Lo lograron varios millones de años antes que las aves o murciélagos actuales”, dijo Cadena, que encontró parte de una mandíbula y de extremidades durante un trabajo de campo realizado en 2017 en una zona rural de Zapatoca, localidad que parece ser, como el paleontólogo apunta, “un mar de fósiles”.

“Es un yacimiento muy interesante para la paleontología colombiana porque allí no solo hay tortugas, también hay tiburones, cocodrilos marinos, ahora los pterosaurios y hay muy bien preservados cangrejos y erizos de mar”, afirmó.

La gran ligereza del pterosaurio se debía a que sus huesos estaban huecos, ya que “fue una adaptación de estos reptiles voladores para alivianar su peso y poder emprender el vuelo”, y tenían, además, numerosos dientes pequeños con los que masticaban cangrejos y peces, entre otros.  

«Lastimosamente el material que encontramos es fragmentario, no es un espécimen completo, lo cual hace que no podamos definir una nueva especie, pero encontramos parte de una mandíbula y nos permite establecer que pertenecen a los ornitho queiroideos», de los que ya hay registros en Brasil, añade el científico.

No es el único fósil que Cadena y su equipo han encontrado en tierras colombianas. En el desierto de La Tatacoa, en el departamento de Huila, los paleontólogos encontraron en 2014 la tortuga más grande de la historia, la Stupendemys Geographicus, cuyo caparazón llegaba a medir casi tres metros y pesaba 1.100 kilos. 

Lo que prueba que aún quedan abismos que explorar en la Prehistoria, cuando seres gigantescos que parecen sacados de la fantasía surcaban ese otro mundo cubierto de agua y volcanes.